Estamos promoviendo junto con otros Sindicatos, el CONICET y la universidad UMET, una experiencia inédita en argentina sobre innovación en manos de los trabajadores
Daniel E. Di Bártolo
Secretario de Educación SADOP - CDN
El SADOP y su participación en el Centro de Innovación de los Trabajadores de la República Argentina (CITRA).
Se profundizan los acuerdos para la constitución del primer Centro de Innovaciòn de los Trabajadores de la República Argentina CITRA. Esta iniciativa inédita para el mundo del trabajo en América Latina, nucleará en dicho centro a la UMET (Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo) , a organizaciones sindicales y al Estado, representado por el CONICET (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Tecnológicas) .
Se realizaron reuniones previas para avanzar sobre esta iniciativa en donde se pusieron en común diversos aspectos relacionados a lo específico de cada grupo de trabajadores y las necesidades de investigaciòn para mejorar la labor y las condiciones de trabajo.
El Centro de Innovación de los Trabajadores, es un proyecto que nace del reconocimiento del mundo del trabajo como eje central en el proceso de innovación social y tecnológica. Se parte de la premisa que los trabajadores desde sus puestos de trabajo son actores clave en la innovación y el cambio tecnológico.
Los saberes en el presente, son dispositivos de legitimación e inciden inmediata y directamente en el establecimiento de nuevas relaciones de dominio- explotación. Las innovaciones y su posterior patentamiento están asociadas al conocimiento científico-empresarial occidental y por tanto están visualizados desde una cosmovisión e intereses comerciales y políticos, que no son precisamente los de los trabajadores.
Respondiendo a esos principios rectores, las patentes son dispositivos para propiciar la concentración de poder y aumentar las desigualdades, siendo característico de los procesos de globalización. Marcan la diferencia entre el conocimiento válido de unos y el NO conocimiento o ilusión de otros. Se reconoce como locus de enunciación , al de los colonizadores europeos, es decir como fuente de conocimiento legítimo.
Los ejes de colonización hoy, pasan por concepciones de ¨individualismo¨y ¨propiedad privada¨y se parte del supuesto que la condición universal para la maximización del conocimiento y de la creatividad es la gratificación económica y a partir de allí se constituyen los regímenes de protección de la creatividad o patentes.
Debe considerarse entonces como aspecto crítico, el nuevo papel que el saber mediante la propiedad intelectual desempeña en la geopolítica de la globalización.
La discusión que debemos dar los trabajadores es en el sentido de para que deben emplearse los regímenes de protección de la propiedad intelectual y su ámbito de aplicación. En ese sentido debe buscar equilibrarse la tensión entre la protección y estímulo a la inversión y los intereses de la sociedad en su conjunto.
Los trabajadores, en nuestra tarea cotidiana, somos generadores de saberes, y la normativa respecto a las innovaciones, traslada la mayor parte del beneficio o renta por el patentamiento de un descubrimiento, a los propietarios de las empresas, dando al trabajador un exiguo rédito, no compensando la validez de ese saber.
El CITRA se constituye como una herramienta para consolidar y revalorizar, la importancia que tiene el trabajador, sus saberes, en los procesos de producción, en los sectores de bienes y servicios y en la educación, concebida como derecho humano. Pensando en achicar brechas de desigualdad y consolidar valores de justicia social.
El SADOP, en virtud del convenio que lo vincula a la UMET, es parte constitutiva del proyecto, integra la Comisión Técnica de articulación y formará parte a través de su Secretario General, del Consejo Consultivo que será uno de los órganos de gobierno del CITRA.
Ing.Agr. Nora Cuello, Secretaría Gremial-Rama docentes técnicos, Secretaría de Educación, Grupo de Trabajo: Educación y Trabajo.
Ciudad Autónoma de Buenos Aires-Abril de 2014