El debate social y mediáticamente instalado sobre el “ausentismo docente” pone el foco exclusivamente en las ausencias al trabajo de maestros y profesores, sugiriendo respuestas de tipo económico administrativas (premio por presentismo, control de ausentismo). Si bien esta postura simplifica un problema complejo y obstaculiza un análisis profundo sobre el tema, el debate constituye una oportunidad para poner en discusión las reales condiciones en las que se trabaja cotidianamente en la escuela y en qué medida esto afecta la salud de este colectivo de trabajadores.
Por el Departamento CyMAT
Secretaría Gremial de SADOP
El enfoque desde las Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo –CyMAT– aporta una mirada integral, que abarca a los trabajadores que faltan –indagando en las causas de sus ausencias– como así también a aquellos que van a trabajar estando enfermos.
Poner al trabajador en el centro de la escena, observar a la escuela como lugar de trabajo, posibilita analizar a la “huida” como forma de buscar un respiro que permita al trabajador escapar momentáneamente de las tensiones acumuladas en su trabajo, a la “normalidad sufriente” y al “presentismo” de trabajadores que aún enfermos asisten a trabajar poniendo en riesgo su salud.
Ausentismo
El ausentismo es un emergente que contribuye a visibilizar las CyMAT en las que nuestros compañeros docentes desarrollan su tarea. En este sentido, el ausentismo se presenta como forma de encontrar un respiro, una huida, una fuga que permite al docente escapar momentáneamente de las tensiones acumuladas en el trabajo, producto de la organización en la escuela. Los docentes tienen una jornada real de trabajo mayor a la establecida en la normativa, tienen a cargo una gran cantidad de alumnos y cursos, difusos límites entre el trabajo y el hogar, poca participación en la toma de decisiones, falta de cooperación y trabajo en equipo con sus pares, la implicación emocional con los alumnos que el propio trabajo exige, y la carga física, mental y psicosocial que todo esto trae aparejado.
Es por ello que consideramos que más que medir resultados es necesario ir a fondo y preguntarse por las causas, animarnos a pensar qué está pasando en la escuela y explorar otras posturas en esta materia; donde unos ven “ausentismo” otros ven reacción “saludable” para seguir.
Para analizar la problemática del ausentismo proponemos mirar las condiciones en que se realiza el trabajo y las consecuencias que esto tiene para la salud, poniendo el foco en la prevención, contando siempre con la participación activa de los trabajadores, quienes aportarán su conocimiento y la experiencia en sus propios puestos de trabajo.
Por otra parte, cabe señalar que el ausentismo es un problema multicausal, que debe ser estudiado desde una perspectiva interdisciplinaria, con la participación del colectivo de trabajadores, siendo relevante su abordaje en la negociación colectiva.
Diferentes investigaciones, tanto a nivel nacional como internacional, estudiaron el tema y lo relacionan con un conjunto de variables como el contexto político, económico y social del país, la caída del prestigio social de los docentes, el aumento de expectativas sobre su trabajo –por ejemplo, educar a jóvenes antes excluidos del sistema–, la relación con los compañeros, los alumnos, los padres de los alumnos, las autoridades de la escuela, etc. Asimismo, está relacionado con el estrés o tensión que sufren los docentes, con la satisfacción laboral, con las posibilidades de promoción limitadas, con el diseño de la organización escolar que no permite los intercambios y con el trabajo con pares. Otra relación que abordan estos estudios es el problema pedagógico que implica no estar preparado o que al docente le falten herramientas para llevar adelante el trabajo debido a la debilidad en la formación.
La Primera Encuesta Nacional sobre las CyMAT de los Docentes Privados
Este trabajo nos proporciona información sobre las diferentes dimensiones de las Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo de los docentes, y también sobre malestares, enfermedades y uso de licencias durante el último año.
En la Encuesta Nacional, que respondieron más de 4.500 docentes en todo el país, se han obtenido herramientas para profundizar el tema del ausentismo docente y sus posibles causas, y también se puede explorar un planteo que ya se viene dando en otros lugares del mundo (como por ejemplo Francia y Canadá), poniendo foco en el presentismo de quienes concurren enfermos a trabajar.
Habiendo analizado ampliamente el estado del arte en esta temática, hicimos foco sobre dos preguntas efectuadas en nuestra investigación:
a.- Pregunta 1: ¿En el último año se tomó licencia? En caso afirmativo, ¿cuántas y cuántos días? Asimismo, se solicitaron los motivos de las mismas.
Licencias. Las respuestas a la primera pregunta, abren puertas para dimensionar el tan vapuleado “ausentismo docente”.
En un promedio superior al 50%, los docentes que trabajan en la educación pública de gestión privada manifestaron que en el último año utilizaron alguna licencia, (el 57% de los maestros y el 54% de los profesores).
Al mirar la cantidad de días de licencia utilizados por estos docentes en el último año, vemos que un 40% en primaria y un 44% en secundaria se tomaron entre 1 y 5 días de licencia, mientras que un 27% en primaria y un 28% en secundaria se tomaron de 6 a 10 días de licencia.
Esto nos permite afirmar que del universo de trabajadores que faltó en el último año, el grupo más fuerte se encuentra conformado por los que faltaron hasta 5 días sobre 365 del año calendario.
Asimismo, se indagó acerca de los motivos por los cuales los trabajadores docentes hicieron uso de las licencias, destacándose con fuerza las licencias por enfermedades de corta duración: un 66,6% de maestros de nivel primario y un 70,4% de los profesores de nivel secundario.
Desde la perspectiva de género (amplia mayoría de mujeres) y edad promedio de los docentes en actividad también es importante detenerse en las licencias por atención a la familia, en tanto un 32,2% de primaria y un 33,1% de secundaria dijo haberlas utilizado en ese sentido en el último año.
Numerosos estudios que abarcan la temática del “ausentismo laboral” se detienen a analizar el alerta que significan las “licencias cortas”, vinculadas a la idea de escapes, de “fuga” saludable, y se indica que las mismas remiten de manera directa a mirar las condiciones de trabajo.
Nuestra investigación proporciona datos suficientes para ahondar en esta línea.
b.- Pregunta 2: Si en el último año padeció alguno de los malestares y/o enfermedades que se presentaban en un listado. En caso de haber padecido alguna de las enfermedades indicadas, se solicitó se indique si tomó licencia por la misma.
MALESTARES Y ENFERMEDADES. En trabajos anteriores hemos desarrollado en detalle gráficos y fundamentaciones de este tema y su vinculación con la salud conforme la percepción de los propios trabajadores.
Ahora, queremos analizar esos mismos datos vinculados a lo que se ha dado en llamar el fenómeno del “presentismo”, que al contrario del ausentismo, consiste en estar físicamente en el puesto de trabajo pero con una productividad mermada. Se trata de personas que van a trabajar aunque no se sientan bien física o psicológicamente.
Estudios recientes sobre el tema muestran que este grupo está constituido por personas que no se atreven a faltar por miedo a llamar la atención, a ser reemplazados, por no perjudicar a los compañeros, etc.
En este punto, nuestra investigación muestra que más del 60% de los trabajadores docentes que manifestaron haber padecido “resfríos, rinitis, dolor de garganta”, “problemas urinarios, renales”, ”hipertensión arterial” y “alergias respiratorias” concurrieron enfermos a trabajar.
Otro dato fuerte: el 73% de los docentes que padecieron “disfonías/nódulos en cuerdas vocales” concurrieron enfermos a trabajar, siendo necesario tener especialmente en cuenta este dato por ser una de las enfermedades profesionales reconocidas en la Ley de Riesgos de Trabajo.
A esto debe sumarse que más de un 70% de los docentes manifiesta haber sufrido en el último año “fatiga, cansancio, desánimo”, “dolores de cabeza, jaqueca”, y más de un 60% dice “estar estresado”, entre otros malestares con los que concurren diariamente a dar clase.
La investigación sobre CyMAT muestra que este fenómeno del “presentismo” también está instalado en la escuela y contribuye así a las líneas investigativas que vienen sosteniendo que ambas cuestiones (“ausentismo/presentismo”) se manifiestan siempre juntas. Si en un colectivo de trabajadores aparece una, es importante explorar la otra, dado que ambas muestran que algo no está funcionando bien y es necesario intervenir estudiando a fondo las CyMAT y proponiendo respuestas saludables. Otros elementos que enriquecen este análisis son los grados de “satisfacción laboral” y la percepción de “carga de trabajo”, que también han sido indagados en nuestra investigación.
Queda así planteado el tema, con esta propuesta de mirar las dos caras de una misma moneda, reiterando lo dicho al principio en cuanto a la oportunidad que se nos presenta de abordar un tema publicitado negativamente, y transformarlo en un debate que nos lleve a intervenir en la mejora cotidiana de las condiciones laborales de este colectivo de trabajadores, para preservar la salud e integridad de todas y todos nuestros docentes.
Por último, estamos convencidos de que la calidad educativa y la presencia pedagógica de los docentes merecen un análisis en profundidad de las características que tiene este trabajo en su hacer cotidiano. La organización del trabajo y las condiciones laborales de los docentes son el punto clave de esta discusión.