No se trata de un evento propiciado por los gobiernos sino por los empresarios y banqueros más poderosos del mundo con la finalidad de disminuir la importancia y el peso de los Estados en beneficio del mercado.
Por Mario Morant
FLATEC*
Davos es una pequeña población de varios miles de habitantes enclavada en las montañas suizas, casi como una fortificación de difícil acceso, en donde se realiza el famoso Foro Económico Mundial a comienzos de cada año.
No se trata de un evento propiciado por los gobiernos sino por los empresarios y banqueros más poderosos del mundo.
Nadie que no sea invitado puede asistir, salvo sus miembros de origen o recientemente incorporados.
Solo periodistas acreditados pueden participar de las sesiones públicas, obviamente no pueden asistir a otro tipo de reuniones más privadas.
También asisten – en calidad de invitados – personalidades de la política que al Foro le interesan.
La historia del Foro
Este Foro fue creado en 1971 por el magnate suizo Klaus Swab a los efectos de reunir en el a los socios estratégicos de los negocios de todo tipo y de mayor envergadura de todo el mundo.
Se trata de un lugar donde los más poderosos y ricos del mundo delinean las políticas mundiales a partir de intereses económicos que les son directamente atinentes.
Hay 100 socios denominados “estratégicos” que confeccionan la agenda del evento.
Es un Foro claramente impulsor de las políticas neoliberales y sus decisiones enmarcadas como “sugerencias” determinan – más allá de los gobiernos – el rumbo de la economía global.
Existen también 200 socios llamados “industriales” como una segunda línea de participación. En el primer grupo, es decir, el de los socios “estratégicos” hay 48 que también pertenecen al Grupo Bilderberg y entre los 200 “industriales” son 97 los que pertenecen a ese grupo.
Esta clara, entonces, la relación entre unos y otros.
Esta relación no es casual ni ociosa, el Grupo Bilderberg es una organización con claros designios políticos de imponer, como sea, el neoliberalismo en el mundo y un gobierno mundial regido por intereses económicos. Vale decir, un gobierno de las Corporaciones financieras.
Por supuesto en este grupo no participan los gobiernos sino mas bien que el Grupo a través –de su influencia– domina gobiernos aparentemente democráticos convirtiéndolos en victimas de sus manipulaciones inescrupulosas.
Así lo que se decide en Davos se instrumenta en Bilderberg. En tanto los pueblos y la democracia “ausentes”.
Otros participantes en Davos
Por ultimo están aquellos a los que se invita con cierta solemnidad y –por cierto– vinculados a sus intereses, que aunque no son personajes de relevancia si pueden ser útiles a los propósitos del Foro.
En la intimidad los llaman “los Bufones” pero los rodean de consideraciones como si fueran importantes en sí mismos.
A veces se trata de gobernantes. Al que gobierna interesado en los negocios que les puedan ofrecer y al Grupo por los negocios que puedan hacer.
La agenda suele ser nutrida y variada desde temas de ecología, empleo, salud, educación, etc. pero el núcleo central alrededor del cual todo se desarrolla son los negocios y –especialmente- la preocupación de no pagar impuestos a los Estados.
La finalidad última siempre es disminuir la importancia y el peso de los Estados en beneficio de las empresas privadas y los bancos.
*Federación Latinoamericana de Trabajadores de la Educacion y la Cultura