La CCSCS se reunió el 13 y 14 de octubre de 2016 para analizar la crisis y paralización del MERCOSUR y revisar su posicionamiento de apoyo crítico, al proceso de integración iniciado hace 25 años.
Los comunicados individuales y conjuntos de las Cancillerías de Argentina, Brasil, Paraguay y finalmente también de Uruguay intentaron construir un relato para acusar a Venezuela de no reunir las condiciones para ejercer la Presidencia Pro Témpore del MERCOSUR del corriente semestre.
La CCSCS denunció rápida y públicamente que se trataba de una estrategia de paralización del bloque. En ese sentido, respaldó y respalda que Venezuela ejerza la PPT porque así lo exige la legítima institucionalidad del bloque. Tanto es así que en 2014 lo hizo por casi un año, lo que deja al descubierto que en esta oportunidad se trata de una excusa que solo se sustenta en la estigmatización política, ideológica e institucional que alguno de aquellos gobiernos impulsan al interior del bloque regional.
Los actuales gobiernos de Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay promueven su política nacional de comercio exterior buscando sumarse a los nuevos tratados de libre comercio a cualquier precio. Por tanto encontramos casi natural que promuevan esa misma política para el MERCOSUR. Y con ese propósito son conscientes que la República Bolivariana de Venezuela es un obstáculo para ello. En ese contexto, el movimiento sindical denuncia los intentos de suspensión o incluso de expulsión de Venezuela.
Ante ello la CCSCS se mantiene en estado de alerta, y continúa dando seguimiento a la evolución de la crisis, mientras reitera el llamamiento a la vuelta de la institucionalidad del bloque regional. El movimiento sindical no participará de ninguna reunión del MERCOSUR que no sea convocada por Venezuela. La expresa radicalización ideológica de los actuales gobiernos de Argentina, Brasil y Paraguay impide a éstos comprender que la integración de los pueblos recala más profundamente que la voluntad temporal de aislar a esta nación sudamericana.
El debate y las reflexiones surgidas en estos dos días definieron el Plan de Acción Sindical del Cono Sur orientado a la lucha contra los Tratados de Libre Comercio, a favor de la democracia, la integración regional y el ejercicio pleno de los derechos humanos para nuestros pueblos.